Por Redacción Profesión Valor 

El DTM llegó al Sachsenring dispuesto a encender emociones, y vaya si lo hizo. Entre lluvia, choques y equipos que recurrieron al heroísmo mecánico, la batalla por el campeonato se aviva a sólo tres fechas de la definición.

La primera carrera del sábado arrancó con lluvia, convirtiendo la pista en un espejo traicionero. En condiciones de pista resbaladiza, Ayhancan Güven aprovechó el caos: dos pilotos favoritos se enredaron en un choque en la última vuelta, dejándole el camino libre para llevarse una victoria inesperada.
— 1.º Aitken, mientras Jordan Pepper y Thomas Preining quedaron fuera del podio por el incidente. — Aitken completó el podio aprovechando el desastre ajeno.

El domingo, carrera sin clemencia

El domingo fue un despliegue de precisión firme. Güven repitió victoria, esta vez sin sobresaltos: superó a Preining, quien fue penalizado con tres vueltas tras un roce con Aitken, y firmó un doblete memorable.
— 1.º Güven, 2.º (tras descalificación) Dörr, 3.º Gounon, aunque Ben Dörr fue descalificado después.

Una jornada en la que fallaron grandes figuras: Jordan Pepper se retiró tras un contacto, Nicki Thiim y Mirko Bortolotti (ABT Sportsline) volvieron a sufrir doble abandono, esta vez por segunda vez en el año, dejando un sabor agrio y una lucha por el campeonato cada vez más frágil.

Por si fuera poco, Thomas Preining criticó duramente la maniobra de Aitken que lo dejó fuera del podio y afirmó haber sido penalizado injustamente.

BMW responde con coraje: remontadas que valen puntos

En medio del descontrol, BMW brilló con estrategia y temple.

• Marco Wittmann escaló de 19º a 5º.

• René Rast, desde 18º, remató en 6º.
  Ambos se mantienen en la pelea por el título, con Schubert Motorsport tercero en la general de equipos.
  
  

Así queda el campeonato (tras Sachsenring)

• Lucas Auer recupera el liderato con 150 puntos.

• Jack Aitken lo persigue con 148.

• Ayhancan Güven entra con 147, nervioso pero vivo.
  — Pepper y Preining siguen en la pelea con 145 y 135 puntos respectivamente.

En Sachsenring, el DTM mostró su alma indomable: cada vuelta contó, cada error costó y cada adelantamiento fue una declaración de intenciones. El doblete de Güven y las remontadas de Wittmann y Rast son hoy historia viva en la pelea por el campeonato.

Hay dos carreras más antes del golpe final: Red Bull Ring (13–14 septiembre) y Hockenheim. Después de este fin de semana, está más claro que nunca: el título está lejos de estar resuelto… y eso es justo lo que el DTM necesita.