Por Tyleen Mc Donald
Innovación, Cultura y Tendencias

Max Verstappen no corre para sumar puntos: corre para marcar territorio. Este domingo, el piloto neerlandés de Oracle Red Bull Racing logró una victoria contundente en el Gran Premio de Azerbaiyán 2025, repitiendo lo que ya había hecho en Monza y dejando claro que el equipo está otra vez en forma.

Desde la pole, Verstappen controló el ritmo, ejecutó la estrategia sin errores y cruzó la meta sin sobresaltos. Su mensaje fue claro: cuando el auto responde, él no deja dudas.

Una carrera sin fisuras

Bakú puede ser traicionero. Entre muros, viento lateral y zonas de frenado complicadas, cualquier error se paga caro. Pero Verstappen se mantuvo firme. Apostó por una estrategia dura a media (Hard–Medium), sin intervención de safety cars, y manejó el desgaste sin comprometer el ritmo.

“Fue un fin de semana increíble. Muy ventoso, muy técnico, pero lo ejecutamos perfecto”, dijo Verstappen. “Este auto se sintió sólido y el equipo trabajó en cada detalle. Así es como se ganan carreras.”

El piloto también resaltó la conexión actual con su equipo: “Cuando todo encaja, es un placer manejar. Estamos disfrutando este momento.”

Red Bull vuelve a ser Red Bull

El director del equipo, Laurent Mekies, fue directo: “No hay balas de plata, pero tampoco excusas. Nos habíamos quedado cortos este año y esto es resultado del trabajo serio. El auto va mejor, Max está afilado y Yuki también tuvo un fin de semana fuerte.”

Yuki Tsunoda logró su mejor resultado con el equipo al terminar sexto, mientras que Liam Lawson (Visa Cash App Racing Bulls) fue quinto, firmando su mejor resultado en Fórmula 1. Isack Hadjar, aún en su temporada debut, completó un fin de semana sólido con un décimo lugar.

Para Visa Cash App Racing Bulls, la carrera fue una doble victoria estratégica. Liam Lawson defendió su posición con inteligencia, mientras Hadjar, a pesar de errores menores y un auto algo inestable en medios, consiguió puntos importantes en una carrera limpia.

“Tuvimos buen ritmo en la parte final. Liam fue impecable. Y con Isack, hay mucho para rescatar. Esto nos pone de nuevo en pelea por el sexto lugar del campeonato”, explicó el jefe de equipo, Alan Permane.

Hadjar lo resumió así: “Fallé en un momento clave, pero terminamos en el Top 10. Sigo aprendiendo y ya pienso en Singapur.”

Con esta victoria, Verstappen muestra que la versión 2025 de Red Bull no está descartada, pese a un inicio de temporada más errático que años anteriores. También quedó claro que el bloque medio (McLaren, Ferrari, Racing Bulls) está más competitivo que nunca.

Lo que viene es clave: circuitos más técnicos, temperaturas cambiantes, y presión real por puntos. Pero si algo dejó claro Bakú es que Verstappen no necesita caos para ganar, solo un auto que le permita hacer lo que mejor sabe: aplastar en silencio.